Reviews

El Juguete Rabioso by Robert Arlt

justinagatti's review against another edition

Go to review page

adventurous slow-paced
  • Plot- or character-driven? A mix
  • Strong character development? N/A
  • Loveable characters? It's complicated
  • Diverse cast of characters? No
  • Flaws of characters a main focus? No

2.0

nuska's review against another edition

Go to review page

5.0

Se le puede adjudicar a la obra una doble interpretación:

1.El punto de vista social: desde esta perspectiva, todas las acciones emprendidas por Silvio se explican a partir de su inserción o exclusión en la sociedad argentina de su tiempo (en función de su relación de amor-odio con su faceta social).
2.El punto de vista literario: según lo que el proceso de aprendizaje descrito en la obra no es de evolución social o maduración del personaje sino de evolución literaria: desde las obras viejas y sombrías de una “caverna platónica” (la librería de don Gaetano) hasta la abierta crítica a Lugones cuya obra se roba de la biblioteca del colegio por ser una edición escasa y poseer alto valor en el mercado y no por su valor literario. Siguiendo la vertiente autobiográfica de la obra, se describe el proceso de maduración literaria (en cuanto a lecturas, pues aún estamos ante una opera prima) del propio Roberto Arlt. No hay duda de que Silvio Astier es un auténtico alter ego de Roberto Arlt.

La primera interpretación posible: el punto de vista social

Arlt trata el tema social con técnicas expresivas vanguardistas. Pero no se queda en el aspecto social de la Argentina de su época: su obra deja traslucir un pesimismo que deja inmersos a sus personajes en una especie de distopía que se excede de lo puramente social y pasa a lo personal. El autor parece manejar a sus personajes como marionetas y cada vez que Silvio realiza un nuevo intento de evolución social, recibe un “castigo” por parte del autor. Estas similitudes, junto con la convergencia de los finales, nos permiten compararlo con Historia de la vida del buscón, de Francisco de Quevedo:
Si en la obra de Quevedo se da a Pablos la opción de marchar a las Indias y el autor ya augura que no conseguirá triunfar porque no consigue triunfar quien cambia de lugar, sino de costumbres, en la obra de Arlt se da a Silvio la opción de ir al Neuquén con un puesto de comodoro, pero por las múltiples ocasiones en las que el personaje ha fracasado en su ascensión social, se puede deducir que esta vez tampoco lo conseguirá (de hecho, parece probable que el personaje de Silvio se “reencarne” posteriormente en Erdosain, protagonista de Los siete locos y Los lanzallamas).

Aunque esta similitud no es casual, ya que la mayoría de críticos aceptan la influencia de Arlt por la novela picaresca como algo indiscutible (las similitudes en la obra son abundantes y parecen indicar que el autor también había leído el Lazarillo) la novela picaresca es la bildungsroman por excelencia y precisamente la obra de Quevedo constituye la cumbre de la picaresca española. En la obra de Arlt permanece la acritud en el tratamiento del personaje, la misma que mantenía Quevedo con su don Pablos, pero no el valor humorístico que caracteriza a ésta. La obra de Arlt no posee humor, al menos de rasgos claramente discernibles para el lector (sí hay cierto humor macabro en el hecho de que el viejo de la librería de Gaetano llore como un bebé ante el anuncio de que ese día no se come cuando prácticamente no hablaba nunca) si hay humor es escaso, y se trata de apenas una sonrisa que produce acto seguido, un sentimiento de culpabilidad.

La crítica no daba crédito a unas tesis que además criticaba las formas sociales que, en el aspecto político, se consideraban más útiles para el progreso humano.

Desde el inicio de la obra, cuando apenas cuanta con catorce años, Silvio Astier empieza a robar con “El club de los caballeros de la Media Noche”. Se trata de una sociedad fundada por él y sus dos amigos Enrique Irzubeta y Lucio. Este club, además de robar como oposición a lo que es socialmente aceptable (para no insertarse dentro de la sociedad y el sistema) constituye un microcosmos interior que “rescata” al protagonista de la barbarie humana exterior.
La ley, el conjunto de normas morales establecidas para vivir inmersos en la urbanidad, viene representada por el miedo a ser descubiertos por la “cana” (la policía).
En este tipo de amistad, a Silvio no le importa salirse de la ley para proteger a sus amigos de la cárcel, como lo demuestra cuando acoge a Enrique y le da un vaso de agua, recordando una escena de la pasión de Cristo. Esto sucede en el primer capítulo, “Los ladrones”. Sin embargo, la mirada del Silvio adulto parece proyectarse sobre dicha amistad como destinándola al fracaso, cuando dice:

Desde ese día hasta la noche del gran peligro, nuestra amistad fue comparable a la de Orestes y Pílades.


El segundo capítulo de la obra, “Los trabajos y los días”, tomado de la obra homónima de Hesíodo, parece una burla, una parodia consciente de la obra griega. Si la obra de Hesíodo gira en torno a las dos tesis de que el trabajo es el destino de todo hombre, pero éste debe ser capaz de aceptar este destino y ser capaz de cumplirlo con buena voluntad; esto queda totalmente contradicho cuando la madre de Silvio le pide que trabaje:

Cuanta desolación. La claridad azul remachaba en el alma la monotonía de toda nuestra vida, caminaba hedionda, taciturna.


La desolación que siente el personaje ante la perspectiva de tener que trabajar es palpable como si hablara de la muerte o de algo igualmente terrible. Silvio ve el destino de trabajar para evolucionar socialmente como una carga, un destino cruel e insensible forjado con propósito tortuoso. Una sucesión de días sin fin que se repetirán bajo un mismo patrón agobiante sin posibilidad de redención.

Silvio también intenta trabajar en este capítulo con el señor Souza, que se dedica a las ciencias ocultas, pero su aspiración acaba en fracaso que Silvio siente con intensidad:

Y otra vez más triste, bajo el sol, emprendí el camino hacia la caverna.


El momento en el que hacen a Silvio cargar con la cesta en el mercado, marca un punto de inflexión en el que el protagonista descubre que tarde o temprano, siempre tendrá que hacer cosas que son propias de su clase social, aunque le humillen o rebajen, aunque esté en total oposición con el resto de la sociedad.
La única salida que el protagonista concibe ante tanta bajeza; ante tanta contradicción al mundo mental que él mismo ha forjado para sustentar su vida demasiado corriente es quemar la librería. Una vez realizada su hazaña se siente satisfecho de ella, incluso importante. Más adelante en la obra, con la traición al Rengo, Silvio le contará al ingeniero que hay momentos en la vida que necesita destrozar la vida de otro hombre, sentirse importante, aunque sea en sentido negativo. El incendio de la librería parece un “ensayo” una antesala al proceso de traición, a la pérdida absoluta de su propia dignidad:

¿Qué pintor hará el cuadro del dependiente dormido, que en sueños sonríe porque ha incendiado la ladronera de su amo?


Después de eso, como un acusado en un juicio, intenta arrepentirse de su acto; pero sin conseguirlo, las palabras le suenan vacías y carentes de sentido. Sí reconoce en cambio que sentirá remordimiento durante el resto de su vida, pero no parece importarle.
Silvio ha alcanzado una libertad con el incendio que estaba muy lejos de sospechar cuando una mañana llevaba la cesta de la mujer de don Gaetano mercado arriba y abajo, si entonces bajó la cabeza ante los que lo miraban con desprecio, ahora la levanta y durante algunos instantes, se siente el hombre más libre del mundo, el más capaz de adorar a la vida:

Yo ahora era un hombre libre, y ¿qué tiene que ver la sociedad con la libertad? Yo ahora era libre, podía hacer lo que se me antojara… matarme si quería… pero eso era algo ridículo… y yo… yo tenía necesidad de hacer algo hermosamente serio, bellamente serio: adorar a la Vida. Y repetí:
Sí, Vida… vos sos linda, Vida… ¿sabés? De aquí en adelante adoraré a todas las cosas hermosas de la Tierra… cierto… adoraré a los árboles, y a las cosas y a los cielos… adoraré todo lo que está en vos… además… decíme, Vida ¿no es cierto que soy un muchacho inteligente? ¿Conociste vos alguno que fuera como yo?


En el tercer capítulo, “El juguete rabioso” Silvio siente el placer que le produce ser admirado por otras personas a causa de su inteligencia, lo que pronto se torna en una nueva decepción, cuando en el ejército le anuncian que no necesitan personas inteligentes, sino brutos para el trabajo. El propio capitán Márquez, que había escuchado sus ideas le dice que su problema es que piensa demasiado, que lo que necesita es estudiar más. El tono de desesperación se va incrementando a medida que avanzan los capítulos:

Comprendí que nunca me resignaría a la vida penuriosa que sobrellevan naturalmente la mayoría de los hombres.


Tras el despido del ejército, se produce el encuentro con el homosexual en la pensión, lo que antes llamábamos la periferia; es decir, se trata de un personaje que no era habitual en la literatura anterior a Arlt (de hecho es éste el primer encuentro homosexual de la literatura argentina). En la narrativa de Arlt se da voz a aquellos que habitualmente no la tenían, se habla por todos los seres marginados que conforman la sociedad argentina.
Aunque el homosexual de la pensión está quizá un tanto exagerado, como si fuera una parodia de sí mismo. Esto se demuestra en hechos como querer cuidar de un hombre para siempre y quedar “embarazada” de él. Silvio lo desprecia, no sólo en el plano social, por estar en una clase inferior a la suya, sino también como persona.

Se trata de un capítulo muy intenso, Silvio siente la imperiosa necesidad de hacer algo, de matarse pero no morir (lo que pretende en realidad es llamar la atención de alguien que lo salve de sí mismo). En la escena siguiente aparece la madre preguntándole el porqué ha hecho eso y le dice que sin él, ella no podría hacer nada (esa dulce madre que acunaba a Arlt con versos de Tasso y Dante siempre aparece como un alma caritativa en sus obras; el padre, por el contrario, es inexistente o aparece como fruto de todos los peores vicios humanos). Y eso es, precisamente lo que Silvio pretendía. La madre aparece siempre como un bálsamo capaz de rescatar al muchacho de sus fantasmas internos. Aunque éste quiera matarse, destruirse en vida:

Yo no he de morir… pero tengo que matarme- y antes de que pudiera reaccionar, la singularidad de esta idea absurda se posesionó vorazmente de mi voluntad.
No he de morir, no… No…, yo no puedo morir…, pero tengo que matarme.
¿De dónde provenía esta certeza ilógica que después ha guiado todos los actos de mi vida?


Pero Silvio tiene algunos rasgos de pertenencia a la clase media argentina, aunque no quiere proletarizarse, y en eso es un típico integrante de la clase media. También en una segunda lectura posible que se realiza en el tema de los inventos (además de las eternas pretensiones de Silvio de deslumbrar a la gente a partir de su inteligencia) y es la idea del “batacazo”, también característica de la clase media argentina.

Arlt construye a través de su obra una sociedad dolorosa, malévola, deshumanizada. Él mismo confesó en la dedicatoria de El jorobadito, que le es imposible ofrecerle (la dedicatoria era para su mujer) una visión rosada de la realidad, porque:

Los seres humanos son más parecidos a monstruos chapoteando en las tinieblas que a los luminosos ángeles de las historias antiguas.


Segunda interpretación: El juguete rabioso desde el punto de vista literario

El personaje de Silvio Astier constituye un auténtico alter ego de su creador Roberto Arlt. Es por eso que siguiendo su relación con los libros a través de la novela, se puede desentrañar la propia evolución literaria de Arlt, desde las lecturas que leía cuando apenas era un adolescente hasta su relación con los libros o la ficción cuando se acerca a la edad adulta.

Si el camino de Silvio es hacia la delincuencia urbana, iniciado por Enrique, también los es hacia la literatura, hacia lo imaginario.
Apenas iniciada la novela, Silvio nos dice que fue un viejo zapatero andaluz quien lo inició en los deleites de la literatura de bandoleros. Silvio empieza la novela leyendo Montbars el Pirata y Wenongo el mohicano.

Formada la sociedad con sus dos amigos, lo primero que roban son libros y de un colegio. Esta posesión de libros ajenos a través del robo, viene de Las montañas de oro, de Leopoldo Lugones y es éste precisamente el libro que roban por su valor en el mercado. Cogen el libro de Lugones porque es una edición muy escasa y valdrá mucho dinero, no por su valor literario. Lo que constituye una crítica a la obra de Lugones, sobre todo por el lenguaje que éste usaba, totalmente opuesto al utilizado por Arlt. Si Lugones está en el otro extremo al lunfardo, Arlt se sitúa en un punto intermedio entre ambos.

Luego encuentran uno de Baudelaire y Enrique cree que es sólo una biografía, pero Silvio se da cuenta de que son sus versos y se apresura a llevárselo a su casa, emocionado por la belleza de esos versos:

Yo te adoro al igual de la bóveda nocturna
¡oh! vaso de tristezas, ¡oh! blanca taciturna,
[…]
y vamos a los asaltos, vamos,
como frente a un cadáver, un coro de gitanos


Versos ante los que Silvio replica que son hermosísimos y se los lleva hacia su casa. Pero que no tienen ningún sentido por lo que se refiere a la segunda estrofa.
Lo que Baudelaire escribió realmente fue:

Je t'adore à l'égal de la voûte nocturne,
O vase de tristesse, ô grande taciturne,
[…]
Je m'avance à l'attaque, et je grimpe aux assauts,
Comme après un cadavre un chœur de vermisseaux


Versos de los que ésta resulta una traducción bastante más adecuada:

Te adoro, como adoro la bóveda nocturna.
¡Oh, vaso de tristezas, oh, gran taciturna!
[…]
Yo renuevo el ataque y los asaltos vanos,
como frente a un cadáver un coro de gusanos


En esta segunda traducción desaparece la blanca mulata y la necrofagia de los gitanos, además de poseer un sentido del que la traducción reproducida en El juguete rabioso por Arlt carece .

El segundo capítulo, se titula directamente “Los trabajos y los días”, se trata del título de uno de los libros de Hesíodo, lo que demuestra que a Arlt también le interesaba la literatura griega, ya que conoce las dos tesis principales de la obra para ser capaz de juzgarlas, cuestionarlas e incluso parodiarlas en su capítulo, negando el trabajo como forma posible de ascensión social.
La librería de don Gaetano representa para Silvio sólo libros viejos, lecturas ya superadas. De hecho, la llama continuamente “la caverna”, título que podría tomarse en sentido platónico, ya que “el mundo de las ideas” estaría constituido por la renovación científica que Souza le ofrece, pero que resulta inalcanzable para Silvio. Quema estos libros como si se despidiera de ellos, y luego saluda a la vida con la emoción de quien ha descubierto un nuevo autor que siempre había estado ahí pero siempre le ha pasado desapercibido.

La traición al Rengo es una forma de autoafirmar el ser actual de Silvio. Denuncia su ser anterior: el ladrón, el inventor fracasado… y también a la clase social del lumen, del adolescente que robaba con el club de la medianoche. No es algo que se relacione con las denuncias de Rocambole por dinero o poder; no es algo materialista ni un medio para conseguir una posición social o la admiración del ingeniero, sino un fin en sí mismo.
Constituye el asesinato del antiguo Silvio y el nacimiento de uno nuevo:

A veces tengo la sensación de que hace una hora que he venido a la tierra y de que todo es nuevo, flamante, hermoso.


Esta traición se ha intentado explicar desde el punto de vista nietzscheano, según el cual, Silvio sería una especie de superhombre, superior al Rengo, al lumen y a lo que representa su clase social, pero también superior al ingeniero que le cuestiona su acto, por las profundas motivaciones que lo impulsan, Silvio le escupe en la cara que se siente superior a él. Así que Silvio es ahora el único capaz de sentir y entender sus profundas causas, lo que lo convierten, a sus ojos en un superhombre porque él es el único capaz de sentir la profunda fuerza que se desprende de su interior y que le hace, a pesar de su acto terrible, adorar a la vida.

Curiosamente, la posterior novela de Arlt, Los siete locos, se inicia precisamente con una traición… pero esta vez la traición es a su personaje principal, Erdosain. Su jefe lo despide por ladrón, porque le ha robado de los fondos, y Erdosain se pregunta quién le habrá traicionado… ¿Una inversión de papeles?

En este capítulo, Silvio pasa de ser un Cristo, en una escena de la pasión (en el momento que da agua a Enrique en el primer capítulo y lo protege en su casa, aún al margen de la ley) para convertirse en un Judas Iscariote, un traidor a sí mismo que, sin embargo; ahora sí se encuentra dentro del margen de la ley. Según el evangelio de San Marcos, Judas recibió dinero por su traición, pero después, arrepentido intentó devolvérselo a los soldados, que lo rechazaron. En la desesperación por su delación, Judas se ahorcó.
Hay muchos paralelismo entre el personaje de Silvio y Judas en esta escena. El ingeniero Vitri también intenta pagarle, pero Silvio rechaza el dinero y asegura tener una motivación más profunda.
En este momento ya no es un Judas o un Rocambole que también traicionaba por dinero, sino alguien que cree haber llegado más lejos, justificado por una profunda convicción que únicamente él es capaz de entender:

Hay momentos en nuestra vida en que tenemos la necesidad de ser canallas, de ensuciarnos hasta adentro, de hacer alguna infamia, yo que sé… de destrozar para siempre la vida de un hombre… y después de hecho eso podremos volver a caminar tranquilos.


Silvio se autojustifica la traición del Rengo a sí mismo, necesita ser como un personaje de esas novelas que lee, un hermoso traidor… alguien que no tiene escrúpulos, que quiere tener algo terrible en su pasado, algo tan terrible que provoque el desprecio de la gente. Y en este sentido, sí es un Judas, el mayor traidor de la historia, el más detestado. También los actos de Rocambole eran despreciados. Y estos dos personajes aún coinciden en otro punto con Silvio: no poseen amor. Se trata de personajes que no son amados.

Arlt parece negar a Silvio durante toda la obra la capacidad de amar. Eleonora está fuera de su alcance por ser de una clase superior, la cocotte también. A Silvio sólo le queda el amor materno, un amor que tampoco es capaz de comprender, ya que intenta matarse sólo para atraer la atención de ella. Así, sin haber alcanzado sus sueños, ni en el amor ni como inventor ni tampoco como poeta como Baudelaire, a Silvio sólo le queda una opción para ser recordado, para no ser invisible ante el resto del mundo: destrozar la vida de un hombre.
En su acto de traición, espera que al menos ese hombre, el Rengo lo recuerde durante el resto de su vida y con ello, se puede decir que Silvio consigue la única opción que Arlt le permitía: ser un muerto en vida. Matarse, pero no morir.

No me importa… y seré hermoso como Judas Iscariote. Toda la vida llevaré una pena… una pena…
La angustia abrirá a mis ojos grandes horizontes espirituales… ¡pero qué tanto embromar! ¿No tengo derecho yo…? , ¿acaso yo…? … Y seré hermoso como Judas Iscariote… y toda la vida llevaré una pena... pero… ¡ah! Es linda la vida, Rengo… es linda… y yo… yo a vos te hundo, te degüello… te mando al “brodo” a vos… sí a vos que sos “pierna”… [baraja] que sos “rana”… yo te hundo a vos… sí, a vos, Rengo… y entonces… entonces seré hermoso como Judas Iscariote… y tendré una pena… una pena…

valeriamillerx's review

Go to review page

sad slow-paced
  • Plot- or character-driven? Character
  • Strong character development? It's complicated
  • Loveable characters? It's complicated
  • Diverse cast of characters? No
  • Flaws of characters a main focus? Yes

3.5

sofimallo's review

Go to review page

dark medium-paced
  • Plot- or character-driven? A mix
  • Strong character development? It's complicated
  • Loveable characters? No
  • Diverse cast of characters? No
  • Flaws of characters a main focus? Yes

3.0

valreads_everyday's review against another edition

Go to review page

4.0

Disfrute este libro mucho mas a mis 22 que a mis 13.

priscilainthesky's review against another edition

Go to review page

5.0

Nunca había leído una verbalización de la marginalidad y la pobreza de esta índole. Me sorprende la destreza con la que esta historia siguen tan vigente y relevante para una sociedad que sin tapujos niega y olvida tanto. Pero además de esta innegable connotación social, la novela sabe capturar el dolor de crecer, la crisis de saberse en un mundo triste, la impotencia con la que sin remedio se aceptan verdades y golpes de la vida. Y la alegría más allá de todo eso. Me fascinó.

andromerot's review

Go to review page

reflective medium-paced
  • Plot- or character-driven? Character
  • Strong character development? No
  • Loveable characters? No
  • Diverse cast of characters? No
  • Flaws of characters a main focus? Yes

3.25

mangodino's review against another edition

Go to review page

1.0

Sobrevalorado como todo lo que escribe Arlt ¬¬

joseffiinna's review against another edition

Go to review page

2.0

no me terminó de convencer, pero si asumo que es interesante y sobre todo para leerlo en la actualidad, ayuda a conocer como la pasaban las clases bajas durante la depresión y lo difícil que era ingeniárselas para sobrevivir, así como la necesidad de la ayuda de las clases superiores que no siempre era brindada. Aún así está escrito en un español podría decirse medianamente antiguo y el principio es bastante confuso, tal vez habrían sido necesarios más detalles. Aun así si me gustó acompañar a Silvio durante este trayecto y creo que se puso en una posición de antihéroe querible.

lulamattia's review against another edition

Go to review page

3.0

es 3,5 por el mero hecho de que no puedo leer cuando estoy leyendo 5 textos para 5 materias distintas y pierdo el hilo de la historia y termino no entendiendo odio absolutamente todo. de todas formas tengo algunas reflexiones:

hace una banda de tiempo que no leía literatura argentina que no sea de los últimos 20 años así que estuvo bueno cambiar un poco, sobre todo en un año en el que estuve leyendo la gran parte de mis libros en inglés. la argentinidad al palo
estuvo muy bueno ver la buenos aires de los años 20, varias veces menciona calles de mi zona y es re loco pensar que son probablemente las mismas
yo SABÍA que iba a haber un personaje gay y no fu una situación TAN homófoba bien ahí
nada, la crítica en la novela y la demostración de la vida de las clases populares es super interesante. en esa misma línea, me encanta el rol que cumple la lectura en los primeros dos capítulos (y en cierta forma en toda la historia) y la relación que tiene silvio con ella

la historia de arlt me parece fantástica, el hecho de que no haya terminado el primario y que se haya convertido en uno de los autores argentinos con más renombre dice un montón

"Algunas veces en la noche, yo pensaba en la belleza con que los poetas estremecieron al mundo, y todo el corazón se me anegaba de pena como una boca con un grito"