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A review by aitorfmg
Endevi, Vol. 3 by Kamome Shirahama
2.0
Como era de esperar, todo este tinglado concluye de una manera irreverente. Teniendo en cuenta todas las catástrofes que han creado Eni y Dewi a lo largo de los tomos anteriores (especialmente el primero, que se basaba en liarla parda), relegar el final a una pelea más resulta realmente anticlimácico. Tampoco pido una lucha a lo shônen; tan solo una conclusión satisfactoria. No creo que se pudiera hacer mucho más con el material de base, pero creo fervientemente que continuar con las chorradas absurdas de los primeros capítulos habría funcionado la mar de bien. Es solo recordar lo de Dios tirándose una paloma y echarme a reír. Por desgracia, este tomo prefiere tirar por las casualidades, una subtrama con hombres que no pinta nada (peor aún la de los policías flipando con la batalla porque "son mujeres jóvenes y guapas luchando en minifalda y con tacones") y las mismas ideas de siempre. Que el mejor capítulo sea el de Kiriel, que no pasa de ser mediocre por su narrativa, dice bastante del volumen.
El mejor recuerdo que me llevaré de esta serie será, sin duda, el fabuloso dibujo de Shirahama, los diseños creados por dioses y un humor que, al menos inicialmente, me llegaba antes que hastiaba. Por lo demás, no lo recomiendo demasiado; quizá para una tarde tonta sin nada mejor que hacer. Si uno no se fija mucho en el fanservice (que sí, todavía persiste en estos volúmenes y no va a mejor, rompiendo completamente con Kiriel lo que habían mostrado de los ángeles como nudistas), las trampas argumentales, la sensación de ir sin rumbo y el humor bastante mediocre, se encontrará una obra muy bien dibujada con dos protagonistas la mar de carismáticas. Yo quiero mucho a Shirahama y se nota que ha puesto un cariño inmenso en esta obra, así que al menos tendré en cuenta los pinitos que montaba en sus orígenes como artista.
El mejor recuerdo que me llevaré de esta serie será, sin duda, el fabuloso dibujo de Shirahama, los diseños creados por dioses y un humor que, al menos inicialmente, me llegaba antes que hastiaba. Por lo demás, no lo recomiendo demasiado; quizá para una tarde tonta sin nada mejor que hacer. Si uno no se fija mucho en el fanservice (que sí, todavía persiste en estos volúmenes y no va a mejor, rompiendo completamente con Kiriel lo que habían mostrado de los ángeles como nudistas), las trampas argumentales, la sensación de ir sin rumbo y el humor bastante mediocre, se encontrará una obra muy bien dibujada con dos protagonistas la mar de carismáticas. Yo quiero mucho a Shirahama y se nota que ha puesto un cariño inmenso en esta obra, así que al menos tendré en cuenta los pinitos que montaba en sus orígenes como artista.