A review by justno
La corte del eclipse by Claudia Ramírez Lomelí

adventurous lighthearted medium-paced
  • Plot- or character-driven? Character
  • Strong character development? It's complicated
  • Loveable characters? It's complicated
  • Diverse cast of characters? Yes
  • Flaws of characters a main focus? Yes

3.5

 
El esperado final de la trilogía, amado por muchos, odiado y criticado por más pocos, La Corte del Eclipse es un libro mucho más largo, con mucha más acción, pero tal vez, demasiado ambicioso. 

De aquí en adelante hay spoilers. 


"—Por todas las estrellas, ¿preferías que lo llamemos encuentro político? ¿Convivencia especial?" 

La Corte del Eclipse retoma no mucho después de los eventos finales de La Ladrona de la Luna, al principio volvemos a Alariel, a conocer las decisiones que se deben tomar ahora que Illardya cambiaba de gobernante, y la preocupación de que a Emil, el rey, desean asesinarlo por no ser el rey legítimo. 

No sé ni por dónde empezar. 

Desde mi primera reseña de estos libros perdoné muchas cosas porque quería darle la oportunidad a la historia completa antes de juzgar algo que no estaba segura si se iba a tratar después, pero al terminar esto me di cuenta que esas cosas que yo creía que luego se iban a resolver simplemente se olvidaron, así que esta reseña es como una reseña de todos los libros según lo que pasó al final. 

" —¡Pues vamos, entonces! —dijo, y después agregó—: Escuché que tienen uno de puntería con ballesta …" 

Los personajes, esta vez conociendo sus arcos completos. 

Emil es insoportable, y desearía que no lo fuera, es un personaje débil y lo ha sido desde el principio, sus pensamientos son extremadamente explícitos, y esto hace que actúe poco, o que cuando lo hace salta de cero a cien en un segundo, se presenta como un hombre (niño) de corazón muy noble, demasiado noble, parece un príncipe de Disney, todo corazón y nada de cerebro. Y eso que él es el rey. 

Elyon se une al club de insoportables, varias veces leí sus partes saltándome párrafos enteros, pero, es graciosa, sí me reí con algunos de sus comentarios, aún así se desaprovechó su arco después de aceptar los poderes de Orkeja en el libro anterior. Su final es aburrido, anticlimático. Elyon no es una parte activa de lo que sucede a su alrededor, a ella solo le pasan las cosas por casualidad. 

Gianna tenía potencial, tenía. La hija de una madre que es claramente abusiva y que es una parte muy grande de su vida, una Solaris poderosa, inteligente, y con mucho conocimiento, pero toma las peores decisiones, se mete en los problemas más estúpidos, tiene un monólogo interno doloroso y su desarrollo de personajes pasa de ser la hija perfecta y sumisa a una asesina; sin enfrentar ninguna consecuencia. 

Bastian tiene muy buena historia, desearía que no repitiera lo mismo cada capítulo que narra (No quiero ser rey, pero no voy a dejar Illardya) porque es un muy buen punto de partida para su arco durante este libro, pero lo convierte en su único rasgo de personalidad. 

Ezra es un personaje que es muy querido,  y veo por qué, realmente no tengo mucho que hablar de él que sea malo, tiene sus momentos en los que se le contagia el espíritu de Emil, pero es un buen personaje. 

Mila y Rhea hay que emparejarlas,  porque lastimosamente apenas aparecen en el libro, desearía poder verlas más,  que el secuestro de Mila hubiese tenido repercusiones reales,  pero todo pasó y nada cambió,  ni para Mila ni en su entorno, de Rhea apenas sabemos que le gusta el mar y quiere ser la Robin Hood de los mares,  pero no hay mucho más que decir de ella. 

Finalmente Gavril, Zelos, Bria y otros varios son irrelevantes,  Gavril y Zelos solo existen en torno a Emil, más allá de eso no tienen ningún otro propósito o deseo. Bria fue una excusa para plantar el plot twist de tu vida, y aunque me gustaba su relación con Mila, su final se sintió como si estuviesen desechando algo que no sirve más. 

En general todos los personajes tienen puntos muy bajos, pero muchos de ellos van más allá de la construcción de sus personalidades y son más una consecuencia de la trama. 

"En Fenrai habría día y noche mientras la tumba estuviera sellada"

El conflicto en este libro es demasiado ambicioso, se resuelve demasiado fácil y nadie enfrenta las consecuencias de sus actos, detrás de la sangre y las escenas de violencia y tortura se ocultan giros de la trama flojos, tragedias sin sentido y villanos sin motivaciones que no le añaden valor a la historia. 

La combinación del conflicto de los rebeldes junto con los poderes de Elyon hacia sentir que había muchísimo por resolver cuando al libro ya le faltaban pocas páginas, dejando así que al conocer cómo es la resolución se siente tonto, casi anti climático, y la batalla que debería presentar el desafío más grande palidece al compararse con la batalla al final de la entrega anterior. Y sus consecuencias son nulas. 

Desde el capítulo 19 se mencionaba la promesa de Ezra, que siempre iba a estar ahí, que no le iba a pasar nada, que iba a volver vivo, por lo tanto todo apuntaba a que iba a morir en batalla, o como mínimo a queda herido de gravedad. Y aunque sí lo apuñalaron todo se resuelve al instante, y en menos de cinco líneas Ezra ya está devuelta en pie y peleando al lado de Emil. No quería que se muriera, pero el momento de mayor clímax en la batalla viene y se va sin más. 

Al igual con el conflicto de Elyon, que promete estar a la altura del sacrificio de Avalon y que se resuelve por arte de magia, literalmente; si era tan sencillo como devolverle los poderes a Avalon y sellar la tumba ¿Por qué no lo hicieron antes? Obviamente no lo sabían, pero sigue siendo una resolución demasiado sencilla sin consecuencias, Elyon se queda sin poderes del sol, y aunque lo presenta como un sacrificio no se siente como tal.

El arco de Ezra no siendo el hijo de la reina Virian me pareció innecesario, pero no me disgustó, creo que si hubiese sido algo que nos contaran desde el inicio, o la mitad del libro sería mucho más interesante, es un conflicto de conveniencia para justificar la trama, pero fue una revelación muy buena. Yo la disfruté.

Y por último, los rebeldes de Lestra, La Corte del Eclipse, que llevan años planeando todo pero que los derrotan muy fácil, es una pelea sangrienta, claro, pero es fácil, y creo que estos rebeldes no debieron ser el conflicto mayor para cerrar esta trilogía. Desde el principio Lestra es mencionado como un territorio de salvajes, pero nunca toma suficiente relevancia como para asumir que la maldad está toda concentrada en Lestra, y que aunque sus medios fueron violentos y causaron mucho daño, sus causas tienen sentido, la población está muriendo por negligencia de los dos gobiernos de Illardya y Alariel, y para pelear en contra de una fuerza como la monarquía que nunca ha querido saber de ellos no se puede pretender mandar un PQRS al castillo y esperar que los respondan, el rey verdadero solamente es relevante por unos segundos y luego lo matan, innecesario. Lestra deserved better, si me lo preguntas a mi.

Lyra debió haber sido la villana, tanto ella como el Sectae tenían todo el potencial y la fuerza para seguir causando estragos, tenían motivos y aún si se quisiera mantener el drama de Lestra se hubiesen podido aliar con ellos (No sería la primera vez que el sectae cambia sus medios por conveniencia, como lo hicieron con el deseo original de Avalon), había mucho potencial desperdiciado en una villana que tenía los motivos, las herramientas y el poder.


—Esta canción es para todas las personas enamoradas o para esas que disfrutan de un buen baile en pareja.

El romance en este libro lo cargan en sus hombros Bastian y Ezra, les debe doler la espalda de todo el peso que están cargando.

El romance prohibido de Elyon y Emil no tiene repercusiones, a nadie le importa, es un conflicto que muy a duras penas los afecta a ellos, ni siquiera un comentario de Marietta Lloyd se ganaron, tal vez es porque no soporto a los personajes, pero no me gusta su relación, Gavril y Emil tienen mucha más química, y Gavril apenas aparece y dice unas cinco líneas en todo el libro.

Rhea y Mila me gustan porque yo soy muy solidaria con las parejas sáficas y porque tenía toda mi fe puesta en que tuviera la oportunidad de redimirse. Pero no, su desarrollo fue apresurado, sus escenas de romance son muy poco románticas, y muchas de ellas son narradas por otros personajes que las están viendo a lo lejos, merecen justicia, y si tengo que encontrarla en Ao3 pues así lo haré.

 Bastian y Ezra se llevan el premio a la mejor relación, hay varias cosas que no me gustan, pero tienen tan buenas escenas que todo se lo perdono, se nota la complicidad, se nota que se quieren, que se preocupan el uno por el otro, se nota que están enamorados, son dos personajes muy fuertes en una relación que les hace justicia, y que desde La Ladrona de la Luna estaba muy bien hecho.


"Cuando Emil dejó ir al dragón, ya no quedaba nada donde antes había estado Arión. El fuego había hecho cenizas cada uno de sus huesos. "

Y ahora otros elementos varios que me molestaron de esta última entrega. 

  • La ilegalidad de las relaciones entre Illardyanos y Alarienses fue olvidada completamente,  sin ninguna mención a esta, aún cuando parecía ser un elemento muy importante de las leyes al inicio del primer libro. 

  • La religión y el potencial perdido de que el último enfrentamiento fuera en contra de un sistema de creencias que insistía en alabar a un mentiroso y regir las decisiones de la corona a su paso (Es decir, que la única razón en contra de la anulación de un matrimonio fuese la iglesia de Helios que nunca antes tuvo relevancia y que nunca más se mencionó) 

  • En este puedo estar muy equivocada,  pero al inicio del primer libro se menciona que Emil y sus amigos tienen 17 años, desde ese punto hasta el último libro deberían tener 18, 19 como máximo,  se menciona que Rhea tiene 25 (O que los aparenta, pero no se confirma ni se niega) dejando así planteado que una mujer de 25 está coqueteando con una niña de 17, aún así Mila dice tener 20 años frente a Bria, lo que significa que en el primer libro tendría 18/19 años. Son inconsistencias que encontré y que no entiendo qué pasó. 

Creo que a pesar de ser el final y no ser tan desastroso como en su momento me pareció el primer libro es un cierre muy débil a una historia con potencial, y que iba por buen camino en el libro anterior, deseaba que este fuera un libro mucho mejor, y estaba esperando un cierre a la altura del camino que la autora ya ha recorrido, pero se queda corto. 

A pesar de todo esto el libro se lee muy rápido, es muy fácil de leer y es entretenido, las portadas y el arte con el que viene me parece precioso. Está hecho con amor, se nota, pero le faltan aún muchas cosas.

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