A review by little_raven
Sobre los Acantilados de Mármol by Ernst Jünger

3.0


Sobre los acantilados de mármol es una novela del escritor alemán [a:Ernst Jünger|281443|Ernst Jünger|https://images.gr-assets.com/authors/1222085840p2/281443.jpg]. Se encuadra dentro de la fantasía, aunque tanto su desarrollo como la inclusión de elementos políticos la separan un poco de los representantes más puros del género.

Los dos protagonistas, ex-soldados retirados de la vida de trinchera, viven ahora una existencia mayormente eremita, repartiendo su tiempo entre la botánica y la lectura de los innumerables tomos de una biblioteca de ensueño. Aunque sin privarse de los eventuales festines que tienen lugar frecuentemente en los caseríos cercanos.

La vida es buena, siendo la mayor preocupación encontrar algún espécimen raro de verbena, o dejarles leche a las serpientes que viven en el jardín (!). Sin embargo, esta existencia idílica se ve amenaza por el Gran Guardabosques, una especie de líder de cierta resistencia que tiene su refugio en los montes de la región, y que parece decidido a imponerse por la fuerza, destrozando todo lo que encuentre a su paso en la manera más brutal que sea posible.

El libro no se queda en contar una historia, sino que está minado de alegorías. Se trata de un alegato contra la barbarie. Al respecto, existen varias interpretaciones: la más simple, ubicar al libro en el contexto de 1939. Así, muchos lo toman como una profecía crítica en cuanto al panorama sociopolítico del momento (algunos dicen contra el stalinismo, otros contra el nacionalsocialismo and so on). Yendo un poco más profundo, se puede tomar eventualmente como un testimonio sobre la decadencia mental y espiritual del hombre, capaz de aplastar cualquier tipo de belleza con tal de saciar sus instintos.

Destaco el uso que hace Jünger del paisaje. No es la típica descripción del verde de las hojas aserradas de las miles de plantas que crecen en el lugar (aunque algo de eso hay también), sino que lo convierte casi en un personaje, siendo el principal responsable de la sensación opresiva que se tiene con el pasar de las páginas. Aunque eso sí, a ritmo lento (de a ratos demasiado lento): el conflicto principal se demora en ocurrir, y el trámite solo se hace llevadero por la voluptuosa pluma del autor. Esa es la mayor crítica que le encuentro al libro.

Si bien el tono de la novela es marcadamente antibélico/antibelicista, también plantea que aún existen cosas por las que vale la pena luchar. O al menos esa es la lectura del libro con la que me quedo, después de todo.