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A review by lucianomazurek
Bajar es lo peor by Mariana Enríquez
2.0
“— ¿Cómo se hace para parar?
— No creo que se pueda”.
No esperaba que la novela que marcó el inicio de la exitosa carrera de Mariana me volara la cabeza pero tampoco que se me haga casi imposible de acabar. Tardé casi un mes en leérmela porque me resultaba tediosa luego de un par de páginas. Y es que es muy fácil perder el hilo de la trama, especialmente cuando no hay una; ese es su principal defecto: el libro es una serie de vivencias que terminan llevando al lector a la nada misma. En consecuencia, la historia nos encierra en un tétrico vórtice de sexo, rebeldía, drogadicción y obsesiones que, a veces llega a parecer interesante, pero pierde su fuerza ante la constante repetición en cada capítulo.
“— Tengo el defecto de pensar que todo es más complicado de lo que parece. No creo que la gente sea tan simple”.
El erotismo y el romanticismo entre el trío Narval, Facundo y Carolina se me hicieron un tanto idealizados; se nota que son personajes que nacieron de la pluma de una escritora de diecinueve años. Pero si hay algo que puedo destacar es la inmersión que la autora consigue con respecto al descarnado mundo de la calle, sus modismos y cómo estos jóvenes luchan por sobrevivir en su hostilidad y a sus propios “mambos”. Esto ya es su marca registrada y lo pude presenciar en varios de sus cuentos (eso sí, con una trama mucho más estructurada). Aun así, a pesar de la cualidad imperfecta y desordenada de la obra, hubieron momentos que me invitaron a reflexionar y le terminé tomando cierto cariño, no sé si se deba a que me la regaló una persona muy especial o a que la mantuve durante mucho tiempo conmigo. Solo la recomendaría como una pieza de culto para aquellos seguidores más fervientes de Mariana.
— No creo que se pueda”.
No esperaba que la novela que marcó el inicio de la exitosa carrera de Mariana me volara la cabeza pero tampoco que se me haga casi imposible de acabar. Tardé casi un mes en leérmela porque me resultaba tediosa luego de un par de páginas. Y es que es muy fácil perder el hilo de la trama, especialmente cuando no hay una; ese es su principal defecto: el libro es una serie de vivencias que terminan llevando al lector a la nada misma. En consecuencia, la historia nos encierra en un tétrico vórtice de sexo, rebeldía, drogadicción y obsesiones que, a veces llega a parecer interesante, pero pierde su fuerza ante la constante repetición en cada capítulo.
“— Tengo el defecto de pensar que todo es más complicado de lo que parece. No creo que la gente sea tan simple”.
El erotismo y el romanticismo entre el trío Narval, Facundo y Carolina se me hicieron un tanto idealizados; se nota que son personajes que nacieron de la pluma de una escritora de diecinueve años. Pero si hay algo que puedo destacar es la inmersión que la autora consigue con respecto al descarnado mundo de la calle, sus modismos y cómo estos jóvenes luchan por sobrevivir en su hostilidad y a sus propios “mambos”. Esto ya es su marca registrada y lo pude presenciar en varios de sus cuentos (eso sí, con una trama mucho más estructurada). Aun así, a pesar de la cualidad imperfecta y desordenada de la obra, hubieron momentos que me invitaron a reflexionar y le terminé tomando cierto cariño, no sé si se deba a que me la regaló una persona muy especial o a que la mantuve durante mucho tiempo conmigo. Solo la recomendaría como una pieza de culto para aquellos seguidores más fervientes de Mariana.